Translate me, we are Iván & Ainhoa

sábado, 29 de septiembre de 2012

AUSTRALIA del 8 de Septiembre al 28 de Septiembre de 2012



Días del 321 al 341

¿Qué hay de nuevo amigos? Por aquí todo sigue igual, trabajando mucho para ahorrar algo de dinerillo y disfrutando de vez en cuando de algún día libre, aunque en estos momentos Iván lleva dos semanas trabajando todos los días, pero el esfuerzo ha merecido la pena o al menos, eso creemos.

El sábado 8 de septiembre fue el cumpleaños de Gordon e Iván colaboró en la preparación de la cena pues en esta ocasión venían amigos de la pareja y fuimos 15 en total. Iván preparó unos riquísimos pinchos de tortilla de patata con pimientos y unos champiñones con jamón ¡que delicia! Que por cierto, no sobró ninguno.



La velada fue agradable, una rica cena y nos metimos a la cama bastantes contentillos después de haber bebido cerveza, vino y champán. Unos más contentillos que otros pero dormimos como dos bebés jejeje..
Al día siguiente después de desayunar íbamos a ir con los de la casa a Bondi Beach que había un festival de cometas, pero al final fuimos en autobús pues no había sitio para nosotros en el coche. Dejémoslo ahí, sin más detalles. Así que decidimos irnos por nuestra cuenta en autobús. Cuando llegamos a la playa, el cielo esta repleto de cometas de mil colores y mil formas, 

nos recordó cuando alquilamos el primer mes la furgoneta que estuvimos en un pueblo de la costa este donde también se realizó este festival, que recuerdos. 
Ahora que nos encontramos en nuestra última etapa de nuestro viaje, miras hacia atrás y te das cuenta de todas las cosas que hemos vivido, de las personas que hemos dejado atrás que esperamos ver de nuevo…en definitiva, ¡que buenos momentos juntos! Los no tan buenos sólo quedan en el olvido o para alguna gracieta ;)
El día lo pasamos disfrutando el uno del otro, haciendo un poco de surf, relax en la playa y riéndonos mientras mirábamos como la gente de nuestro alrededor volaba las cometas y se enganchaban unas con otras ¡que cristo! Jajaja…



El resto de los días hemos trabajado tanto en casa de Bell & Gordon, como en casa de Hans & Carol, e Iván con los españoles. Además, las dos últimas semanas los miércoles hemos ido con Carol, la mujer de Hans, a una propiedad familiar que están preparando para su venta a ayudarla un poco. Hemos hecho diferentes trabajillos como arreglar el camino de piedras que conduce a las casas, cortar troncos, limpiar cristales, limpiar la playa… porque ¡sí! Tiene una pequeña playa privada además de un embarcadero privado y unas vistas increíbles al mar. Así que os podéis hacer a la idea de cuántos cristales tienen las casas jajaja…







Un día también fuimos a pasar el día juntos al centro y estuvimos recordando cuando vinimos aquí por primera vez. Estuvimos dando un paseo por el Hyde Park, por los jardines botánicos… para después comer tirados en la hierba con vistas a la ópera. ¡Gran día!






 Hace dos semanas, cuando estábamos ultimando en el piso que hemos hecho en casa de Bell & Gordon, Bell nos dijo que no nos podíamos quedar hasta el 10 de Octubre que es cuando tenemos el primer vuelo de regreso a casa. No nos pilló mucho de sorpresa pues sabíamos que no teníamos claro el quedarnos aquí hasta el final porque no nos lo habían asegurado del todo. Nos decepcionamos un poco y Ainhoa un poco más,  pero sólo en aquel momento pues nos encontrábamos con la situación de que no sabíamos que hacer nuestros últimos 10 días, aunque bueno al final 10 días los pasas en cualquier lado. Tras deliberar qué hacer y después de que nuestros amigos los españoles y la mujer de Hans nos ofrecieran su casa ya lo tenemos decidido. Al final, nos quedamos con que hemos pasado dos meses disfrutando de la casa, de las increíbles vistas, de las puestas de sol, de Harrison, de las ricas cenas juntos, de las cervezas con Christophe, de Sunday y Pepe,  de nuestras salidas en kayak, del jardín… ¡hemos pasado muy buenos momentos!

Ayer viernes disfrutamos de nuestra ultima cena en la casa todos juntos y hoy sábado, después de desayunar  unos huevos con bacon y tomate natural, hemos preparado las mochilas y hemos ido a tomar con Eloy y Ana (los gallegos) un vermut a su casa y un poco de jamón, un pequeño adelanto de España. Hemos pasado un rato muy agradable a manos de nuestros amigos compatriotas. Gracias por estos días.

A fin de cuentas, en estos dos meses, hemos conseguido ahorrar algo de dinerillo y al final hemos adelantado nuestro viaje de regreso a casa, pero no sin antes estar 11 días en la isla de Taiwán. Siiiiiii ¡que nos vamos a Taiwán! Hemos cambiado el vuelo con destino Taipei que era donde hacíamos nuestra primera escala al 29 de septiembre. Aprovecharemos nuestros últimos días de nuestra aventura por este mundo para recorrernos la isla, pero estamos convencidos de que comenzará otra nueva aventura pero antes tenemos muchas ganas de empaparnos de nuestros familiares y amigos que tanto echamos en falta.
¡Que ya no nos queda nada para vernos!
Así que ahora nos encontramos escribiendo estas últimas líneas en Australia, lo que supone un punto y aparte de esta magnífica aventura juntos en este país.

El 12 de Octubre estaremos pisando suelo español y esperamos veros a todos muy pronto, pues no será por ganas.

Nos despedimos no sin antes felicitar al tío de Ainhoa, Agustín tirrintintín, que el pasado 17 de septiembre fue su cumpleaños; a su primo Gorka que ya ha empezado una nueva cifra pues el 18 de septiembre cumplió 30 años y al tío de Iván, Josechu que el 20 de septiembre cumplió un año más y ya está rozando una nueva cifra, disfruta que te queda poco para una nueva crisis jejeje… ¡FELICIDADES a TODOS! A nuestro regreso lo celebraremos con un buen vino y una gran comida TIPICAL ISPANIS yujuuuuuu.

Muchos besos y abrazos.
¡Seguimos con la cuenta atrás!

lunes, 10 de septiembre de 2012

AUSTRALIA del 28 de julio al 7 de Septiembre de 2012


                                             
Días del 279 al 320

            Hola a todos, no es que nos hayamos olvidado de escribir, que no nos hemos olvidado pero… después de mucho tiempo como turistas (más gastos que ingresos), hemos empezado a trabajar y no paramos ni un instante en el día y claro haber quien es el guapito que tras trabajar más de 8 horas se pone a escribir. Pero finalmente tras una breve deliberación, hemos decidido escribir, ya que la idea era contaros el final y enseñaros las últimas fotos a nuestro regreso…
           
            ¡Ya estamos de vuelta en Australia! Despegamos en una noche de frío invernal en Nueva Zelanda y llegamos al invierno cálido de Sydney. Lo primero nada más llegar, ya que era nuestra tercera entrada al país, los amables señores de la aduana (sarcasmo total), nos retiraron los pasaportes y nos reunieron por separado, para bombardearnos a preguntar y averiguar de donde sacamos el dinero para estar viajando tanto tiempo ya que Australia es muy caro y porque entrábamos otra vez al país. Nuestra respuesta fue sencilla, me lo da mi madre que esta forrada… A él que le importa, en fin tras responder a sus preguntas y decir finalmente que somos helpex (Exchange trabajo por alojamiento y comida), nos dejaron entrar.
Nuestra siguiente aventurilla es que nuestro equipaje especial, nuestras preciadas tablas, no salían, finalmente tras media hora de espera, que nos sirvió para tranquilizarnos un poco, ya que los aduaneros nos habían dejado un poco temblorosos, no hay que olvidar que somos trabajadores ilegales, finalmente salieron. Más tarde debíamos coger un tren al centro, pero casualmente, las líneas estaban cortadas y tuvimos que coger un autobús ¡gratis!, cosa que nos pareció una buena noticia, ya que nos ahorramos 30 dólares. A nuestra llegada, tuvimos que cambiar de autobús y coger otro, pero otra vez la suerte estaba de nuestro lado y como solo disponíamos de 50 dólares el conductor, nos perdono el ticket ¡yujuuuuuuuuu! Pero no acaba aquí la cosa, al coger el siguiente autobús que ya nos dejaba en nuestro destino, después de cambiar a monedas y billetes, como era su último viaje y nos vio tan cargados, el conductor nos invitó al trayecto… Esta es nuestra ciudad en Australia, Sydney nos ama, jajaja.
A nuestra llegada a la casa, nos recibieron Pepe & Sunday, dos perros muy cariñosos 

y Bell & Gordon, una pareja peculiar y agradable de treinta y tantos, nos estaban esperando con una cervecita. Más tarde nos instalamos en nuestra habitación ¡preciosa!

y comimos una rica cena con un vino exquisito. Tras la típica charla, nos fuimos a la cama ya que estábamos exhaustos.

            El domingo, no nos dejaban trabajar, pero después de mucho insistir, trabajamos. El trabajo para el siguiente mes y medio era restaurar la casa de al lado, ya que la querían alquilar. Con lo que en los siguientes días, hemos lijado, pintado, puesto azulejos, hemos hecho algo de carpintería, electricidad, limpieza, poner moqueta… En este momento ya está casi terminada, sólo quedan cuatro cosillas y listo para entrar a vivir. Somos unos expertos restauradores y todo ello sin ayuda externa, solo nosotros dos ¿alguien tiene que restaurar algo en su casa? Jajaja..

            En la casa junto a esta adorable pareja, vive Harrison  su hijo de dos años al que adoramos y nos pasamos las horas jugando con él.


 Algún día que otro nos ha tocado hacer de canguro, pero bien, poco a poco vamos aprendiendo jejeje. También vive Christophe un francés loco, que paga renta por una habitación, su trabajo es el de pastelero y gracias a él, Iván consiguió su primer empleo. Pepe & Sunday son dos perros que también viven en la casa, son unos chuchos muy majetes que les encanta que les tiren el palo a todas horas.



            Los siguientes días a nuestra llegada los pasamos trabajando en la casa, buscando trabajo por el barrio… tenemos tantas cosas que contaros que se nos olvida lo mejor, pero lo dejamos para luego. Por donde iba, ahh ¡sí! poniendo carteles en los supermercados y disfrutando de la maravilla del lugar.

            La casa, esto es lo mejor,




estamos en un barrio de Sydney  bastante caro, en concreto estamos en la calle más cara del barrio, esto es porque la casa da a la ría, donde se ve el puente de Sydney y un poco la ópera, todos los días vemos unas puestas de sol increíbles.



Las vistas desde la casa son inmejorables.


Tenemos canoas, con las que hemos salido un par de veces a remar.



Cañas de pescar, donde pescamos desde el jardín.



El sitio es un paraíso en medio de la ciudad, se te olvida que estas en una ciudad de 4 millones y medio de habitantes, a tan solo 10 minutos del centro en ferry y poco más en bus, pero que si vas andando como a una hora y poco. En estos momentos nadie diría que somos backpackers (mochileros) como dice nuestro amigo Christophe, parecemos millonarios, jajaja.

            Algún día Iván ha cocinado para todos exquisitas cenas y sobre todo el día que hizo una paella. Estaba deliciosa y encima en una paellera.


            Una vez que uno encuentra el primer trabajo todos vienen seguidos, Iván empezó en la panadería limpiando cacharros, ya que también ponen bocadillos, lasañas y comidas, los domingos. Tras su primer día, a la jefa le gustó como funcionaba y le dio trabajo de repartidor lunes, jueves y sábados, con lo que se levanta a las 5 y cuando llega de repartir es ayudante de cocina, los domingos friegaplatos. Mientras Ainho hace las horas de Iván en la casa y los días que Iván no trabaja en la panadería trabaja en la casa. A los pocos días, le llamó un español, en concreto un gallego que lleva muchos años en Australia para hacer chapuzas, pero bueno, tras trabajar el primer día y tener que trabajar con radial en altura, Iván le dijo que a ese precio no le interesaba, ese día se lo pagó a buen precio ya que le había dicho que era para pintar no para soldar. A los pocos días otra llamada de un Australiano, parece ser que poner un cartel con nuestras habilidades y el teléfono en el supermercado fue una muy buena idea, el caso es que esta vez Iván le puso el precio alto y el hombre dijo que si. Tras su primer día, quedo impresionado y tras insistir Iván en que su novia era muy buena pintora accedió a que ella también trabajara y le pago 5 dólares más la hora ¡increíble! con lo que vamos una o dos veces por semana 8 horas al día a pintar a la casa de Hans, un par de señores mayores psiquiatras más que forrados de trabajar, donde nos tratan súper bien.
El gallego volvió a llamar a Iván a los dos días y le dijo que si quería trabajar que allí tenía trabajo, pero le dijimos que teníamos trabajo para dos semanas. Así quedo la cosa, pero el lunes volvió a llamar de nuevo y le dijo que pondría un precio que le necesitaba, así que después de mucho meditar, Iván deja la panadería ya que le pagan una miseria y se dedica a chapucero a tiempo completo.
Así es, a día de hoy Iván ha dejado la panadería para trabajar con el español puesto que al final le paga a buen precio la hora y encima le tratan a mimo, no sabemos hasta cuando tendrá trabajo con los gallegos padre e hijo pero trabajando menos horas que en la panadería, librando el domingo y sin tener que levantarse tan temprano gana más dinero ¡perfecto! Además, compaginando este trabajo con el del australiano Hans y la casa de Bell & Gordon.

            El sábado 10 de agosto estábamos trabajando juntos en la casa de Bell & Gordon y llegó Christophe para preguntarnos que si nos gustaría ir por la tarde a ver un  partido de fútbol australiano, en concreto de los Swans de Sydney, que su jefa le había regalado 4 entradas para ver el partido del sábado por la noche. Sin pensarlo mucho accedimos y la verdad es que fue una experiencia única. Pasamos un frío del carajo, pero nos echamos unas risas. Unas cervecitas antes del partido con unas patatitas fritas en el descanso, con muy buena compañía.



            Hace dos semanas que nos hemos trasladado a la habitación del ático, donde estaba Christophe, una habitación muy acogedora cuya puerta es secreta tras una estantería en el salón. 


Estamos muy bien lo que pasa que en una de las ventanas no hay cortina y cuando sale el sol a las 6 los ojos como platos jejejeje,, pero todo hay que decir que para las 10 ya estamos dormidos.

            Con tanto trabajo os podéis imaginar que trabajamos los siete días a la semana entre 8 y 11 horas al día, pero volveremos a casa con un poquito de dinero. En realidad, paramos el día del cumpleaños de Iván, 

donde nos levantamos tarde (a las 9 de la mañana), Iván abrió los regalos, una postal increíble de felicitación de su familia, un libro (es el regalo que mas ilusión me ha hecho en mi vida, casi más de siete meses sin leer) que le enviaron sus padres y un montón de regalitos que la churri le regaló. Tremendamente agradecido e ilusionado al recibir las felicitaciones de toda mi familia, os quiero. 

Más tarde comimos pronto y nos fuimos a dar un paseo en piragua de 3 horas hasta un parque nacional que se suponía que estaba cerca, pero… total que igual que cansados que si hubiéramos trabajado jejeje, pero mucho más gratificante.



Cenamos un rico guiso a manos de Bell 

y de postre una tarta hecha especialmente por Christophe para Iván de fresa y chocolate, un buen regalo que un pastelero te haga una tarta para ti en su día de fiesta, todo un privilegio. Después de soplar las velas con Harrison, 

Bell y Gordon le regalaron un llavero de Australia para abrir cervezas a Iván. Un cumpleaños extraño lejos de los nuestros, pero divertido.

            Cuando tenemos un ratito nos relajamos en casa, 


nos vamos a pasear y a ver alguna cosa que nos queda de ver por la ciudad. 






El miércoles 29 de agosto, fuimos a ver una exposición de arte en la isla Cockatoo ¡asombroso! en la cuál se levantó el mayor astillero de Australia durante el siglo XX y también fue una prisión y reformatorio. Para ir tuvimos que acceder en ferry y Bell nos dio un par de pases que finalmente no usamos ya que en el ferry no nos los pidieron,yujuuuuuuuuuuuu!











Algún día hemos ido a la playa hacer surf pero ahora está más complicado porque necesitamos un día entero puesto que tardamos más de una hora y media en llegar así que… ¡poco surf! Pero no nos podemos quejar.


           


             Nos despedimos de todos, no sin antes terminar felicitando a SARITA, que el pasado 7 de Agosto cumplió 25 años, al igual que nuestro amigo NACHO el 8 de Agosto y, el 25 de agosto la abuela de Iván cumplió un añito más ¡FELICIDADES ABUELA! Esperamos que hayáis disfrutado de vuestro día y un abrazo muy fuerte para todos. Seguir disfrutando del verano.

¡Empezamos la cuanta atrás para la vuelta a casa!