Translate me, we are Iván & Ainhoa

lunes, 14 de mayo de 2012

AUSTRALIA del 28 de Abril al 14 de Mayo de 2012


                                            
Días del 188 al 204

            Feliz día de la madre a todas las Mamás que leéis un poquito nuestras aventurillas y felicidades en especial a nuestras mamis, Rosa y Pili, a las que tanto extrañamos… Sois las mejores, no cambiéis.
             En Broome pasamos tres días visitando la ciudad y preguntando por los negocios de la zona ofreciendo nuestros servicios, cosa que ha resultado inútil en cada una de las ciudades en la que nos hemos parado, en total es probable que hayamos pedido trabajo en más de 1000 establecimientos, una cifra que nos tiene completamente desalentados pero por la que no perdemos las ganas de buscar. Lo más destacable de Broome fueron los camellos por la playa al atardecer, algo realmente hermoso, el barrio chino con su cine de 1916 el cual sigue funcionando, no es increíble. Algo a destacar entre el ciento de cosas que visitamos fue el cementerio japonés, todos ellos fallecidos en la búsqueda de perlas en esta ciudad. También hicimos una coladita, menuda odisea, no teníamos suficiente cuerda para todo, jaja y una de las tardes paseando por una playa de arenas rojas nos encontramos que estaba llena de ermitaños, nos lo pasamos pipa dándoles la vuelta menudo esfuerzo tenían que hacer los pobres con sus enormes conchas.











            La siguiente ciudad marcada en el mapa, fue Derbi, de la que no podemos destacar nada a su favor, además en esta ciudad comienza el Top End y ya esta prohibido bañarse en el mar por los cocodrilos de mar, los cuales también suben por los ríos… así que ni bañarnos pudimos.

            Para llegar a Kununurra había dos posibilidades la carretera asfaltada con 1000 kilómetros y la carretera sin asfaltar machacada por las cientas de inundaciones que sufre en la época lluviosa, a que no adivináis por donde fuimos, por el camino de cabras, eso si solo hicimos unos 300km por esa carretera, más tarde nos desviamos a la carretera asfaltada ya que una vez más nos vimos en una odisea. Tras unas decenas de kilómetros la carretera asfaltada se terminó, así que continuamos unos pocos kilómetros por carretera sin asfaltar hasta llegar a un cartel en el cual decía que todas las carreteras estaban abiertas a los vehículos… Continuamos por la carretera la cual poco a poco iba empeorando, todo esto cruzándonos con trenes de carretera a una velocidad de vértigo escupiendo un mar de piedras y polvo a su paso, la cosa asusta de verdad. Tras 100 kilómetros nos encontramos con una señal que advertía: RIO CRUZANDO. Efectivamente tuvimos que cruzar un río por medio, con una furgoneta tracción trasera con rudas de carretera, no hubo problema ya que el riachuelo era pequeño no más de 2 metros de ancho y no más de medio de profundidad. Según fuimos haciendo kilómetros nos encontramos con otros siete de las mismas características, unos más grandes, otros más pequeños, pero el octavo hay el octavo, un río de unos 10 metros de ancho con una profundidad de un metro por lo menos, el depósito marcaba algo menos de la mitad y era muy posible que no llegáramos si nos dábamos la vuelta… Así que Iván metió segunda, aceleró y Plofff, tendríais que haber visto la cara de Ainho cuando el agua paso por encima del coche, casi se le cae la mandíbula al suelo, hay que decir que lo cruzamos sin ningún problema, asustados, pero sin ningún problema. Pero hay no quedo la cosa, un par de decenas de kilómetros más adelante nos encontramos con la madre de todos los ríos, unos veinte metros de anche y un metro o más de profundidad, tras un tiempo de analizar el río, y ver que el fondo era de piedrillas, pasamos despacito para que no entrara agua en el filtro del aire y tras el medio minuto más largo de nuestras vidas salvamos el obstáculo sin ningún incidente, yuhuuu. Cuando por fin llegamos a la carretera asfaltada no antes sin soltar todo el aire de nuestros pulmones, vimos que a este lado la señal marcaba: ABIERTO SOLO A 4X4. Que fuerte y al otro lado esta abierto para todos los vehículos… Para matar al tipo que pone las señales.








Tras tardar en hacer 400 kilómetros unas 7 horas, llegamos al Parque Nacional de Geike Gorge, donde nuestra guía decía que estaba lleno de cocodrilos y tiburones toro, pero la verdad es que anduvimos más de 4 kilómetros y no vimos nada de nada, de hecho no hemos visto todavía ni la cola de un cocodrilo, que decepción. Esa noche la pasamos en un área de servicio las cuales están provistas de baños y zonas de barbacoa, es normal cuando una cuidad de otra dista más de 1000 kilómetros y no hay nada de por medio nada más que tierra roja, un par de gasolineras-pueblo y algún nido de termitas que otro.

            Por la mañana llegamos a Kununurra, una ciudad en medio de la nada con un lago increíblemente bonito, llamado presa de diversión, donde no hay cocodrilos y te puedes bañar, aunque Ainho prefirió no bañarse y en el cual también aterrizan y despegan hidroaviones, algo curioso que no habíamos visto nunca. Aquí pasamos un par de días entre la rutina de preguntas y ver la ciudad, aquí por fin nos cogieron el teléfono, pero sin muchas esperanzas. Además tras 20 días nos tomamos unas cervezas que compramos de oferta, Iván se derretía del gusto, algo maravilloso. El segundo día por la mañana nos visito el Ranger y nos advirtió que no podíamos dormir por allí y que teníamos que alejarnos 20 kilómetros de la ciudad, con lo que, tras pasar el día en el lago, al atardecer nos pusimos en carretera.





            La noche la pasamos en otro parque nacional el cual no estábamos interesados en visitar pero tenía buenas instalaciones para dormir y no teníamos que desviarnos apenas. Unos cientos de kilómetros llegamos a Katherine, una ciudad la cual años atrás en la época de lluvias el río llego a subir 18 metros de la altura normal, el pueblo quedo devastado. Este pueblo nos llegó muy adentro, cuando descubrimos un manantial de aguas termales, con aguas transparentes de color azul, calentitas y a escasos dos kilómetros de la ciudad. Aquí también nos cogieron el teléfono, pero en dos días estaba todo visto y tras la necesidad de trabajo continuamos rumbo Batchelor a las puertas de un Parque Nacional hermosísimo.





            A la hora de comer llegamos a Batchelor, donde mala pata, no teníamos cobertura en ninguno de nuestros tres teléfonos y era día 5, cumpleaños del Abuelito de Ainho y víspera del día de la madre, así que tras preguntar por trabajo nos vinimos a Darwin, para poder felicitar a nuestros seres queridos. Por la tarde del domingo día de la madre y tras felicitar a nuestras bellas mamas, nos volvimos a Batchelor para entrar al Parque Nacional de Litchfield, algo bellísimo nos quedaba por descubrir.

            Al parque llegamos el domingo por la noche así que ese día nos conformamos con buscar la zona de acampada para dormir y otra vez los buzones para meter el dinero, esta vez queríamos hacer lo medio correcto, pagar por una persona, pero tras disponernos a meter el dinero en el buzón nos dimos cuenta de que no había parcelas disponibles, con lo cual, aparcamos en el parking de coches y no pagamos, es justo.
En el parque estuvimos cuatro días visitando todas las cascadas, cataratas, caminando por las rutas y disfrutando de la naturaleza en su estado puro.
















            Ahora estamos en Darwin donde el primer día por la noche nos avisaron una pareja de agentes que no se podía dormir en el coche en la ciudad de Darwin y que la próxima vez tendríamos que pagar una multa de 175 dólares… Bien empezamos. Por lo demás Darwin es una ciudad pequeñita de 70000 habitantes, con un montón de mercadillos donde ponen de todo tipo de alimentos que huelen increíblemente bien y puedes encontrar cosas de lo mas estrafalarias, con unos lagos tremendos de bonitos. Para los niños y los no tan niños hay un acuapark gratuito, con tres tipos de toboganes y piscinas, algo curiosísimo y bastante divertido, ah y un cubo de mas de 1000litros que cada rato soltaba el agua y te ponía como un cristo si no lo sabias...
Tras preguntar en un centenar de sitios para trabajar y visto que hay una oferta de trabajadores increíblemente grande para la poca demanda y nosotros estamos a la cola ya que no disponemos de papeles. Ahora nos vamos por lo menos 15 días a trabajar a un café en medio de un parque nacional donde no hay nada, a trabajar a cambio de alojamiento y comida, y quien sabe igual nos dan algo de dinerillo, lo importante es no estar parados y mejor si no gastamos, que empezábamos a estar un poco deprimidillos.















            Esta vez felicitamos con todo el amor de nuestro corazón a Agustín, el abuelito de Ainho, que cumplió la bonita cifra de 90 años y está como un chaval. FELICIDADES ABUELITO y FELIZ DIA DE LA MADRE.
           
            Un beso muy muy grande para todos.